Confrontación: lo que es en palabras simples, ejemplos, causas

Polémica

La confrontación es una confrontación derivada de un choque de intereses, puntos de vista, ideas, principios, etc. Sus partidos pueden ser estados, bloques económicos y militares políticos, organizaciones y otros temas. Un conflicto interpersonal prolongado también puede llamarse confrontación, aunque este concepto se usa con mayor frecuencia en relación con estructuras y organizaciones en lugar de individuos.

El término «confrontación» proviene de la palabra latina confrontio (oposición), que a su vez se deriva de las palabras con (unión, contra, opuesta) y frons (frente). Por lo tanto, esta palabra puede traducirse literalmente como «colisión de frente».

Dependiendo de la forma de manifestación, se distinguen dos tipos de confrontación:

  • Activo. Las partes entran en una confrontación abierta, incluidos varios métodos de presión sobre el oponente, el uso de medidas y agresión duras, infligación intencional de daños.
  • Pasivo. Hay tensión entre las partes, pero no se mueven hacia acciones activas y confrontación abierta.

La confrontación ocurre en diferentes esferas de la sociedad. Puede surgir en las esferas nacionales, políticas, económicas o sociales. Sus partidos pueden ser personas y empresas comunes, estructuras políticas, organizaciones comerciales y sin fines de lucro, estados y asociaciones internacionales. Al mismo tiempo, la palabra «conflicto» se usa con mayor frecuencia para describir una disputa doméstica ordinaria, mientras que el término «confrontación» es más adecuado para describir la confrontación de sistemas y organizaciones.

Ejemplos de confrontación

Para comprender mejor qué es la confrontación, veamos algunos ejemplos de diferentes esferas.

Confrontación militar

Obviamente, esta es una confrontación entre las fuerzas armadas de los partidos opuestos. En algunos casos, la confrontación militar puede tomar la forma de hostilidades abiertas. Aún así, generalmente implica una fase de confrontación «fría». Las fiestas construyen armamentos, ejercicios de conducir y «traquetalizan» armas.

Si las tensiones aumentan, los lados pueden organizar provocaciones. Una de las provocaciones más comunes es la intrusión de un avión militar o helicóptero en el espacio aéreo de otro. Como regla general, en tales casos, los aviones de combate del oponente escoltan el avión intrusivo hasta que sale del espacio aéreo del país.

Confrontación en psicología

En psicoterapia, se utiliza la técnica de confrontación, un método especial por el cual los psicoterapeutas ayudan a los pacientes en conflicto a resolver problemas en la comunicación interpersonal. Su esencia es que el especialista demuestra visualmente al paciente cuán incómoda puede ser la comunicación con él para el interlocutor. Esta técnica también se puede utilizar para señalar errores en las opiniones y creencias del paciente, en su actitud hacia el mundo que lo rodea.

Consideremos una situación hipotética como ejemplo. El cliente de un psicoterapeuta afirma que tiene un equipo muy malo. Los colegas lo tratan irrespetuosamente y hostil son reacios a hablar con él y no escuchan su consejo. Después de hablar con él, el terapeuta se da cuenta de que es irascible, gruñón y tiende a criticar bruscamente todo lo que ve.

Habiendo resuelto esto, el terapeuta muestra al cliente cómo se comunica con él para los demás. Para hacer esto, también comienza a gruñir, hablando de todo de manera negativa. Presiona deliberadamente al cliente e intenta incomodarlo por esas características de comunicación que son peculiares para sí mismo. El cliente no nota de inmediato los paralelos, pero las explicaciones del terapeuta lo ayudan a comprender qué es exactamente repulsivo para los demás.

Confrontación en la familia

Las confrontaciones en las relaciones familiares son uno de los temas más importantes en la conflicto. Esta ciencia distingue tres formas principales de confrontación familiar:

  • Clásico. Las confrontaciones en la familia surgen con frecuencia. Las personas pelean debido a las diferencias en las opiniones, pero luego se reconcilian nuevamente y continúan viviendo como si no hubiera conflicto. Esta forma de confrontación no conduce a consecuencias negativas y, a menudo, incluso ayuda a mejorar la comprensión mutua.
  • Irresoluto. Estas son situaciones de conflicto continuas que no se pueden resolver. A veces, las partes fingen que todo está bien, pero no hay un diálogo que «cierre» la confrontación entre ellas. Ambas partes todavía están insatisfechas, y el conflicto continúa «ardiendo» hasta que un día se destaca nuevamente.
  • Crisis. La confrontación alcanza tanta fuerza que puede destruir a la familia, incluso si ambas partes no quieren tal resultado. E incluso si una confrontación de crisis termina bien y las partes logran cerrar por completo la situación del conflicto, aún puede haber una grieta en la relación que no se puede solucionar.

Confrontación social

En cualquier sociedad, incluso la más próspera, siempre hay estratificación social. Esto significa que hay contradicciones entre las personas que pertenecen a diferentes estratos y clases. Esto inevitablemente conduce a la confrontación social, cuya presencia generalmente conduce a uno de los dos resultados:

  • Revolución o golpe (como la Revolución de 1917 en Rusia).
  • Reformas que suavizan la desigualdad de clase y reducen el nivel de contradicciones en la sociedad.
  • Confrontación geopolítica

En la era de la globalización, la confrontación entre los sistemas políticos del mundo se ha vuelto relevante. El ejemplo más famoso de tal confrontación es la llamada Guerra Fría, en la que, por un lado, participaron los Estados Unidos y otros estados occidentales, y por otro lado: la URSS, el bloque OIA y otros países.

Causas de confrontación

Todas las razones por las cuales puede surgir la confrontación se pueden dividir en dos grupos: subjetivos y objetivos. También hay una clasificación más compleja, que incluye 4 categorías de razones:

  • personal;
  • sociopsicológico;
  • organizacional y gerencial;
  • razones objetivas.

Las dos primeras categorías son subjetivas, ya que están relacionadas con las características personales de las partes que entran en la confrontación. Los segundos dos grupos son objetivos, ya que dependen de las circunstancias y las condiciones externas de interacción entre las partes.

Más específicamente, podemos distinguir las siguientes razones comunes para el surgimiento de la confrontación:

  • divergencia de puntos de vista, intereses, valores, opiniones;
  • Inteligencia emocional mal desarrollada, lo que reduce el nivel de comprensión mutua;
  • diferencias en el estilo de vida;
  • diferencias en las percepciones de una determinada situación (por ejemplo, debido a diferentes fuentes de información);
  • estereotipos que implican oposición entre ciertos grupos y comunidades;
  • Deficiencias en el marco legal que regula las relaciones interpersonales.

Etapas de desarrollo de confrontación

La confrontación es un proceso de desarrollo dinámico que se puede clasificar en varias etapas. Curiosamente, el desarrollo de este proceso y las transiciones entre etapas son respaldadas inconscientemente por ambas partes. Los investigadores identifican tres etapas principales, cada una de las cuales debe examinarse en detalle.

1- Etapa latente

En esta etapa, surgen contradicciones entre las partes, pero todavía no hay confrontación como tal. Por lo tanto, esta etapa se llama pre-conflicto o preconfrontacional. Se caracteriza por las siguientes características:

  • La comunicación entre las partes se descompone y surgen malentendidos. Comienzan a ver las mismas situaciones de manera diferente.
  • La situación contribuye a la acumulación de contradicciones. La situación se complica por el hecho de que el diálogo constructivo entre las partes se vuelve imposible.
  • Las diferencias en el carácter, los puntos de vista y los valores espirituales de las partes se manifiestan claramente. Si antes no hubiera contradicciones, ahora se vuelve claramente visible que las partes perciban el mundo que las rodea de manera diferente.

Por sí mismos, estos matices generalmente no conducen a la confrontación. Pero si se está gestando, contribuyen a su desarrollo, proporcionándole un terreno «fértil» para el crecimiento. Con la ayuda de estos factores, las partes se mueven rápidamente a la siguiente etapa.

2- Fase activa

Cada parte busca ganar superioridad en la confrontación y demostrar su rectitud, en relación con la cual la situación comienza a convertirse en un conflicto. En esta fase crece la tensión, las partes demuestran reacciones emocionales e impulsivas. Ahora la confrontación se vuelve obvia no solo para los participantes, sino también para los demás.

En esta etapa, 2 tipos de confrontaciones pueden distinguirse claramente:

  • Destructivo. Las partes demuestran emociones negativas, se mueven para dirigir insultos e incluso intentos de dañar al oponente.
  • Constructivo. Cada parte se esfuerza por el diálogo y la búsqueda de compromiso, expresa con calma su posición y escucha la opinión de la otra parte. Puede haber muestras de emoción, pero nadie busca insultar o dañar deliberadamente al oponente.

Las partes se ocupan de la esencia del problema y buscan una forma de resolverlo. Cada uno de ellos indica claramente su posición y busca (o no busca) comprender la posición del otro. La forma en que se desarrolla la confrontación en esta etapa determina cómo se resolverá.

3. Resolución

En esta etapa, la confrontación se resuelve de una forma u otra. Se distinguen cuatro métodos principales de resolución:

  • Compromiso. Encontrar una solución intermedia. Se tienen en cuenta los intereses de ambas partes, con cada parte haciendo ciertas concesiones.
  • Cooperación. Las partes encuentran una solución que sea conveniente y favorable para cada uno de ellos, que se puede lograr trabajando juntas. Si una de las partes se encuentra en una posición menos favorable, la otra hace un esfuerzo para compensarlo.
  • Violencia. Una parte resuelve un problema a su favor utilizando la fuerza o la influencia e ignorando los intereses de la otra parte. La violencia puede adoptar muchas formas: influencia física o mental, presión legal, daño a la reputación, toxicidad, etc.
  • Evitación. La situación está «silenciada» y pretende resolverse. Al mismo tiempo, las partes siguen insatisfechas y siguen acumulando emociones negativas, que posteriormente pueden conducir a un nuevo enfrentamiento más agudo.

El compromiso y la cooperación son formas constructivas de resolver una confrontación y son preferibles en cualquier situación. La violencia y la evasión son formas destructivas que son comprensiblemente indeseables.

Conclusión

La confrontación puede ocurrir en diferentes niveles, tanto entre estados como entre personas comunes y corrientes. Pero independientemente del nivel en el que surja, es importante encontrar una forma de resolución constructiva. No se puede prolongar una situación problemática fingiendo que no existe o convertirla en un conflicto acalorado entre las partes. La mejor manera de resolverlo es encontrar una solución mutuamente beneficiosa o al menos de compromiso que satisfaga a ambas partes y les permita mantener buenas relaciones.