Conflicto social: concepto, ejemplos, causas, funciones

La comunicación

El conflicto social es una confrontación abierta entre individuos o grupos, causada por la agravación de las contradicciones existentes.

Esta es una de las formas de interacción social causadas por el choque de intereses de los participantes. El tema del conflicto social puede ser cualquier cosa igualmente importante para todas las (dos o más) partes, y la causa, las circunstancias sociales que condujeron a la situación de conflicto.

El conflicto social se caracteriza por una escalada gradual de confrontación, lo que puede conducir a una mayor agresión por parte de los participantes y la transición a acciones violentas. Todo comienza con la aparición de una situación disputable. Una de las partes causa daño material, físico o moral al otro, y este último a su vez busca una forma de responder de manera digna.

La conflicto se ocupa del estudio de los conflictos sociales. Además, en la segunda mitad del siglo XX, una dirección relativamente independiente, la teoría del conflicto social, surgió dentro de esta disciplina. Uno de los autores más famosos de las obras en este campo fue el sociólogo anglo-alemán Ralph Darendorf (1929-2009). Él creía que el conflicto es un elemento importante del desarrollo social, porque en cualquier sociedad siempre habrá personas y grupos cuyos intereses se contradicen mutuamente.

Ejemplos de conflictos sociales

Si sacamos el conflicto interno de los paréntesis, casi cualquier conflicto puede considerarse un conflicto social, independientemente de su escala y número de participantes. Al mismo tiempo, todos los conflictos se pueden clasificar en grupos dependiendo de las circunstancias y los actores involucrados:

  • Calle. Estos son todo tipo de enfrentamientos entre extraños (una pelea callejera común) o grupos a sabiendas hostiles (pandillas callejeras, fanáticos de los clubes de fútbol).
  • Familia. Este grupo puede considerarse el más diverso. Incluye disputas sobre dinero, tareas del hogar, comportamiento de los cónyuges, crianza de niños, comunicación con familiares, etc.
  • Trabajadores. Estas son confrontaciones sobre cuestiones como salarios, horas de trabajo, alcance de los deberes, disponibilidad de trabajo a tasa de piezas, trabajo extracurricular, conflictos interpersonales entre los empleados, problemas de competencia y desarrollo profesional.
  • Sociopolítico. Este grupo incluye disturbios populares, enfrentamientos entre la juventud y la policía, las manifestaciones, los conflictos entre los partidos políticos y las ramas del gobierno.
  • Internacional. Varias formas de presión de los estados entre sí, confrontaciones económicas, comerciales y militares.

La estructura del conflicto social

La conflicología moderna distingue los elementos estructurales como:

  • Sujetos – Partes del conflicto;
  • Sujeto: la fuente de contradicciones;
  • causa: la situación que causó el conflicto;
  • ocasión: una acción o evento que provocó la confrontación de las partes.

A veces, las consecuencias del conflicto también se consideran un elemento constituyente. Las consecuencias pueden ser constructivas (acuerdo entre las partes) y destructivas (daño causado a todas las partes o una de ellas).

Los sujetos de un conflicto pueden ser no solo las partes, sino también los no participantes, como:

  • Testigos: aquellos que observan pero no intervienen;
  • instigadores: aquellos que contribuyen a la escalada del conflicto;
  • Habilitadores: personas que ayudan (a menudo sin saberlo) a uno o incluso a ambos lados, contribuyendo a la escalada de la confrontación;
  • Mediadores: personas que intentan ayudar a resolver el conflicto.

Causas de conflictos sociales

La principal causa de conflicto es la existencia de diferencias en los intereses, objetivos o puntos de vista de diferentes personas o grupos. Para que sean posibles los desacuerdos, las partes deben estar relacionadas entre sí. Los desacuerdos a menudo son artificiales, por lo que los investigadores distinguen dos tipos de causas: objetivos y subjetivos.

Las causas objetivas comunes de los conflictos sociales son:

  • Económico (desempleo, bajo salario, inflación);
  • social (estratificación de la sociedad, discriminación de ciertos estratos, instituciones sociales disfuncionales);
  • religioso (confrontación entre religiones, imposición de puntos de vista religiosos en un estado secular);
  • Política (usurpación del poder, inestabilidad de la situación política, corrupción, violación de las promesas por parte de los políticos).

Causas subjetivas comunes:

  • contradicciones entre los intereses personales de las personas;
  • inconsistencia de las normas sociales con necesidades reales;
  • Naturaleza humana imperfecta (egoísmo y egocentrismo, percepción subjetiva de la realidad, incapacidad para mirar la situación a través de los ojos de otras personas).

Funciones de conflicto social

El conflicto social es un fenómeno que cumple una serie de funciones importantes para la sociedad:

  • Señalización. El conflicto señala la presencia de problemas. Es un indicador que muestra el estado de la sociedad, los deseos de las personas, su insatisfacción con la situación actual y las razones de esta insatisfacción. Cualquier confrontación tiene razones, e incluso si son subjetivas, todavía son problemas que deben resolverse.
  • Informativo. Para los sociólogos, cualquier conflicto social es una fuente de información valiosa. Al estudiarlo, entienden las causas y circunstancias que llevaron a su aparición. También pueden estudiar cómo se desarrolla para que puedan usar este conocimiento en adelante.
  • Diferenciación. Cualquier confrontación social ayuda a una sociedad a adquirir estructura al hacer que incluso las personas que anteriormente preferían no estar interesadas o involucradas en nada se interesen en eventos externos.
  • Dinámica. Esta función fue enfatizada por los proponentes del marxismo. Argumentaron que cualquier situación de conflicto contribuye al desarrollo de la sociedad, acelerando los procesos sociales.

Clasificación de conflictos sociales

La sociología utiliza varias formas de clasificación, en las que se tienen en cuenta las principales propiedades de los conflictos sociales.

Clasificación por materias:

  • interpersonal (confrontación de individuos);
  • intergrupo (confrontación de grupos sociales y otras comunidades).

Clasificación por la dirección del conflicto:

  • destructivo (lucha agresiva con la imposición de daños);
  • constructivo (discusión dirigida a un acuerdo mutuamente beneficioso).

Clasificación por duración:

  • A corto plazo (generalmente tales conflictos se resuelven en un episodio, por ejemplo, una pelea callejera o una disputa familiar);
  • prolongado (una confrontación prolongada que involucra varios episodios de conflictos).

Clasificación por causa:

  • Familia y doméstica;
  • sociopolítico;
  • socioeconómico;
  • trabajo y producción;
  • religioso e ideológico.

Clasificación por la naturaleza del desarrollo:

  • espontáneo (una confrontación repentina);
  • Deliberado (se hicieron esfuerzos intencionales para crear el conflicto).

Etapas de conflicto social

Los autores modernos distinguen 4 etapas a través de las cuales pasa el conflicto:

  • Situación previa al conflicto. Esta etapa consta de dos fases: latente y abierta. En la fase latente, se forma la situación, las partes están insatisfechas. En la fase abierta, las partes reconocen la existencia de un conflicto de intereses y los puntos de tensión surgen.
  • El conflicto propiamente dicho. La etapa principal también incluye dos fases. La primera fase es la formación de una actitud psicológica hacia la confrontación, intenta suprimir al oponente, para convencer a otros de sus fechorías y atraer al público a su lado. Los actores no básicos están involucrados en el conflicto: testigos, cómplices, mediadores e instigadores. La segunda fase es la fractura y la reevaluación de los valores. Las partes llevan el conflicto al pico de la tensión, lo que puede conducir a un nuevo formato de confrontación o buscar formas de reconciliación.
  • Finalización de la confrontación. Si las partes eligen la reconciliación, esta es la etapa final, ya que el conflicto no puede terminar en un momento.
  • Situación posterior al conflicto. Se requiere una resolución final de la situación antes de que las partes puedan continuar interactuando pacíficamente.

Resolución de conflictos sociales

Es imposible prevenir todos los conflictos. Esta declaración es cierta tanto a nivel de hogar como en el nivel de los estados. En cambio, es necesario buscar formas de resolver constructivamente situaciones de conflicto de una manera que satisfaga a todas las partes.

Formas de resolver conflictos sociales:

  • Negociación (para eliminar los malentendidos, ambas partes deberían tener la oportunidad de hablar);
  • Mediación (cada parte del conflicto tiene su propia opinión subjetiva, por lo que la ayuda de un tercero puede ser útil);
  • arbitraje (puede recurrir al procedimiento formal de resolver una disputa civil en la corte);
  • solución contundente (uso de potencia u otra superioridad vigente por una de las partes);
  • Compromiso (concesiones mutuas en aras de la reconciliación).

Para que sea posible una resolución exitosa de una situación de conflicto, son necesarias las siguientes condiciones:

  • La causa debe establecerse;
  • Se deben entender los objetivos de los participantes;
  • Todas las partes del conflicto deben luchar por la reconciliación;
  • Se debe definir una forma de resolver el conflicto (una hoja de ruta).

Consecuencias del conflicto social

Obviamente, todo conflicto tiene consecuencias. Pueden ser positivos para una de las partes (la otra hace concesiones) o ambas (se resuelven las viejas contradicciones que interfirían con la relación). Las consecuencias negativas generalmente consisten en agitación emocional, pérdidas materiales, deterioro de las relaciones entre las partes y el surgimiento de nuevas circunstancias negativas.

Los conflictos de los grupos sociales generalmente aumentan el nivel de cohesión dentro de ellos, lo que en la mayoría de los casos puede considerarse consecuencias positivas. Casi cualquier conflicto, si se resuelve con éxito, hace que las partes se vuelvan más conscientes de los intereses propios y de los demás, así como de las circunstancias que pueden conducir a nuevas situaciones de conflictos.

Conclusión

El conflicto social es una de las formas de interacción social. Es imposible prescindir de los conflictos, y surgen regularmente en cualquier relación, tanto a nivel doméstico como a nivel internacional. Y dado que es imposible prevenirlos, es necesario concentrarse en cómo salir de manera competente de situaciones de conflicto con consecuencias positivas para todas las partes.