Proxemics: qué es, breve descripción, ideas principales

Comunicación informal < Span> La distancia de la comunicación personal entre los rusos es un poco más corta que entre los estadounidenses y los europeos, pero más larga que entre los latinoamericanos.

Uno de los aspectos más interesantes de la comunicación no verbal es la distancia que las personas mantienen al comunicarse. Según esto, puedes decir mucho sobre el carácter y el temperamento de estas personas, cuánto tiempo se conocen y cómo se tratan. El estudio de este aspecto de la interacción interpersonal se dedica a una ciencia especial: proxemias. Hoy hablaremos en detalle sobre qué es y qué información puede proporcionar.

¿Qué es las proxemias?

Proxemics es una disciplina científica en la intersección de la psicología social y la semiótica (la ciencia de los signos utilizados para la comunicación). Estudia cómo las personas eligen y perciben la distancia cuando interactúan entre sí. Por lo tanto, el tema de la disciplina es solo un aspecto de la comunicación no verbal: la distancia entre las personas. Pero en muchos casos puede contar mucho más sobre los interlocutores que el contenido de su comunicación verbal.

La distancia entre las personas, así como la forma en que cambia en el proceso de comunicación, muestra muchas características de sus relaciones, como la cercanía del conocimiento, el nivel de benevolencia, la presencia de conflictos, etc. El concepto básico de proxemias es el espacio personal, una zona que una persona considera inconscientemente suya e intenta hacerse más cómoda para sí misma. Cuando alguien más invade esta zona, cualquier persona siente incomodidad e intenta aumentar la distancia.

El término «proxemics» se forma a partir de la proximidad de la palabra inglesa, que se traduce como «cercanía» o «proximidad». Se considera que su autor es el psicólogo estadounidense Edward Hall, quien demostró en sus obras que cada individuo tiene su propio espacio personal y se esfuerza inconscientemente por hacerlo cómodo para sí mismo. En 1969, publicó el libro «lenguaje silencioso», en el que describió en detalle cómo las personas usan y perciben la distancia al comunicarse entre sí.

Edward Hall dio la siguiente definición: Proxemics es una forma de comunicación no verbal, que se manifiesta en la distancia entre las personas, así como en la forma en que esta distancia cambia en el proceso de comunicación. El investigador estaba convencido de que todos los movimientos mutuos en el proceso de interacción interpersonal no son accidentales, sino que llevan información importante sobre la actitud de los interlocutores entre sí. Al mismo tiempo, la percepción del espacio personal por cada persona es individual y depende de muchos factores, como educación, carácter, temperamento, características culturales, etc.

Tipos de distancias en la comunicación

En el libro mencionado anteriormente, Edward Hall identificó 4 distancias que percibimos de manera diferente. Dependiendo de cómo nos relacionemos con el interlocutor y qué tan cerca estamos de él, eligimos inconscientemente a qué distancia mantener al comunicarnos. Consideremos las peculiaridades de cada una de las distancias (zonas) con más detalle.

Íntimo

La distancia íntima es un espacio en el que aceptamos dejar que solo las personas más cercanas puedan ser amantes, niños y padres, a veces también parientes y amigos cercanos. Por lo general, esta distancia es de hasta 45 centímetros, pero en algunas personas puede alcanzar 60, en otras, limitada a 25 centímetros. Si otra persona invade la zona íntima, la persona tiene molestias y deseo de distanciarse de él.

Se cree que la zona íntima es más amplia en aquellos que crecieron en el pueblo, porque no tienen que montar el metro y pararse en líneas. Lo mismo es característico de las personas que tienen problemas con la socialización. No les gusta estar cerca de extraños, por lo que se sienten incómodos en lugares públicos, donde la distancia interpersonal habitual está inevitablemente rota. Por lo general, esas personas intentan expandir su espacio personal organizando cosas a su alrededor y tratando de ocupar esos lugares donde es más difícil acercarse a ellos (por ejemplo, en una esquina).

Las personas agresivas a menudo usan la invasión del área íntima de otra persona como una herramienta de presión. En un intento de salirse con la suya, se ciernen sobre la persona, agitan sus brazos o se acercan a ellos de repente. Ellos mismos ni siquiera se dan cuenta, pero de esta manera causan incomodidad al interlocutor, lo que lo obliga a aceptar las condiciones establecidas, siempre y cuando la presión se detenga.

Personal

La distancia o zona personal es el espacio en el que estamos dispuestos a dejar que los que nos sentimos positivos ingresan. Por lo general, es una distancia de 50 centímetros a 1. 2 metros. Como regla general, a esta distancia nos comunicamos con amigos, conocidos, colegas, socios comerciales y otras personas a las que conocemos bien y de quienes no nos sentimos amenazados.

El radio de la zona personal también puede variar de persona a persona. Depende del carácter, el temperamento, la educación y otros factores. Por ejemplo, sanguine y colérico generalmente buscan automáticamente reducir la distancia, mientras que las flías y melancólicas intentan distanciarse. A veces esto se puede notar desde el exterior, observando a la gente socializar en la calle. Uno de ellos puede dar pequeños pasos hacia el otro, y el segundo, retirarse automáticamente de él. Esto no significa que el primero sea desagradable para el segundo, solo que tienen diferentes distancias personales.

Social

La distancia social es la distancia que elegimos para la comunicación empresarial. Por lo general, varía de 1. 2 a 3. 7 metros. Esta distancia se tiene en cuenta, en particular, al elegir el tamaño y la forma de las tablas de reuniones. Curiosamente, durante las negociaciones en una tabla de este tipo, cada participante percibe un segmento de la tabla como su zona personal, y la intrusión de un extraño en esta zona causará una reacción negativa.

Público

El público es la distancia adecuada para hablar. Por lo general, esta distancia está entre 3. 5 y 7. 5 metros, pero puede ser más. La peculiaridad de la distancia pública es que implica una interacción unidireccional. No es adecuado para diálogos, sino que una persona habla y las otras lo escuchan (y pueden hacer preguntas). Esta interacción no implica conocimientos personales entre los participantes, solo el orador generalmente se presenta.

Arreglo espacial

Los estudios proxemics no solo la distancia entre las personas y los límites de diferentes zonas de confort, sino también la ubicación mutua en el espacio. Por ejemplo, al comunicarnos en la tabla, podemos distinguir 4 variantes de la posición mutua de los interlocutores:

  • Esquina. Las personas no se sientan una frente a la otra, sino cerca de una esquina para que quede entre ellas. Así suele tener lugar la comunicación personal entre familiares, amigos, cónyuges y otras personas cercanas. Esta disposición es conveniente porque permite a cada participante «ajustar» la distancia. La esquina, por así decirlo, divide el espacio, creando para cada interlocutor su propia zona íntima y permitiéndole alejarse un poco si lo desea. Al mismo tiempo, esta disposición mutua les permite utilizar el lenguaje de los gestos y el tacto en la comunicación.
  • Negocio. Esta es la disposición en la que dos personas están del mismo lado de la mesa. Es conveniente para la comunicación, la discusión de cuestiones comerciales y el estudio conjunto de documentos. Este acuerdo lo utilizan socios comerciales que confían entre sí.
  • Competitivo-defensivo. Se trata de una disposición clásica en la que los interlocutores se sientan en lados opuestos de la mesa. Es adecuado para negocios y otras negociaciones en las que los participantes necesitan discutir temas controvertidos y llegar a un acuerdo.
  • Independiente. Se trata de una disposición en la que las personas se sientan deliberadamente de tal manera que sea obvio que no interactúan entre sí. Esta es, por ejemplo, la posición que adoptan desconocidos sentados en el mismo banco de un parque o en la misma mesa de un comedor público. También se puede decir que los estudiantes sentados en el mismo escritorio en una conferencia son independientes (por supuesto, pueden hablar entre sí, pero ese no es el propósito de sentarse en el escritorio).

Zonas personales en diferentes culturas.

Al estudiar varios aspectos de la comunicación espacial, Edward Hall también tuvo en cuenta un factor como la cultura. Éstos son algunos de sus hallazgos, que reflejó en su libro Silent Language:

  • Los europeos y los estadounidenses dividen las habitaciones en zonas con la ayuda de rodapiés y bordes, al mismo tiempo que los muebles se colocan a lo largo de las paredes y no se utilizan para dividir el espacio;
  • Los japoneses son mucho más sensibles a la violación del espacio personal que los europeos;
  • A los chinos y japoneses les gustan las habitaciones con paredes correderas que les permiten ajustar el espacio según la situación;
  • Los árabes se sienten cómodos tocándose como una señal de afecto, mientras que los japoneses, por el contrario, perciben el contacto durante una conversación como una falta de respeto;
  • Los brasileños se acercan mucho cuando hablan, lo que incomoda a los interlocutores europeos y estadounidenses;
  • La distancia de la comunicación personal entre los rusos es un poco más corta que entre los estadounidenses y los europeos, pero más larga que entre los latinoamericanos.

Conclusión

Proxemics estudia tal aspecto de la comunicación no verbal como la ubicación mutua de las personas en el espacio. Examina detalles como la distancia entre los interlocutores y cómo cada interlocutor percibe y usa esa distancia. También analiza las posturas de las personas y el posicionamiento mutuo, así como su posición en relación con los objetos cercanos (por ejemplo, una mesa).

Proxemics es una ciencia joven. La fecha de su aparición se puede considerar en 1969. Fue en este año que el psicólogo estadounidense Edward Hall, considerado su fundador, publicó su libro «Lenguaje silencioso», en el que describió las principales disposiciones de la nueva ciencia de «espacial espacialcomunicación».