Maximalismo adolescente: concepto, ejemplos, síntomas, fases

Una dama dura

El maximalismo es una tendencia a los extremos, en la que una persona siempre se esfuerza por hacer todo al máximo y de la mejor manera posible. Este rasgo de carácter se manifiesta especialmente en la juventud. Por lo tanto, se formó una combinación estable de «maximalismo juvenil». Hoy examinaremos en detalle qué es este rasgo de carácter, cómo y cuándo se manifiesta, y también consideraremos algunos consejos útiles para los padres que quieran ayudar a sus hijos a afrontar este problema lo antes posible.

¿Qué es el maximalismo adolescente?

El maximalismo adolescente es un rasgo específico de la psique que hace que los adolescentes y jóvenes juzguen todo de manera categórica y directa, no permitan la flexibilidad de juicio, no acepten compromisos, exageren sus habilidades y hagan planes grandiosos. Este rasgo de carácter surge en la adolescencia temprana y desaparece gradualmente a medida que maduran y acumulan experiencia de vida.

El concepto mismo de «maximalismo» no es una época y, en diversos grados, es característico de casi todas las personas. Cualquier adulto, que perciba adecuadamente sus propias capacidades, bien puede esforzarse por alcanzar el ideal en algunas áreas. Por ejemplo, al organizar una cita romántica en el aniversario de la vida matrimonial, no es pecado permitirse ser maximalista a los 40 años. Y algunas personas incluso conservan algunas opiniones maximalistas durante toda su vida.

¿A qué edad se manifiesta el maximalismo?

Esta característica de la psique puede aparecer antes o más tarde, pero la edad más común es los 12 años. Los psicólogos dividen todo el período del maximalismo adolescente en tres fases:

  1. Fase temprana. A la edad de 12 a 15 años, el niño se reconoce como una personalidad independiente y separada y su conciencia comienza a reestructurarse. Quiere tomar decisiones independientes, pero al mismo tiempo no está preparado para la responsabilidad que le exigen los demás. Esto provoca protestas internas y falta de voluntad para cumplir con las demandas de los adultos.
  2. Fase Media. Entre los 15 y los 18 años, los niños y las niñas atraviesan la pubertad y las hormonas están cambiando drásticamente su psique. Además, experimentan toda una gama de sentimientos que antes desconocían: amor, atracción, resentimiento por un amor no correspondido, celos, etc. Al mismo tiempo, fingen ser adultos reales e intentan por todos los medios demostrar su edad adulta a los demás.
  3. Fase tardía. Entre los 18 y los 22 años, los niños y las niñas ya son fisiológicamente maduros. Sus pensamientos ya no están confusos debido a las hormonas furiosas, pero la experiencia de vida es todavía muy poca. Piensan mucho en el significado de la vida, filosofan, intentan encontrar su propósito en la vida, hacen planes profesionales ambiciosos y sueñan con crear una familia ideal.

¿Cómo se manifiesta el maximalismo adolescente?

Para comprender mejor qué es el maximalismo adolescente, es necesario comprender sus principales manifestaciones. Aquí todo es bastante individual, pero hay una serie de signos característicos propios de la mayoría de los adolescentes que atraviesan este período:

  1. Insatisfacción. El niño comienza a tener una lucha interna y constantemente expresa insatisfacción. No le gusta su propio armario, comienza a resentirse cuando sus padres le ofrecen un plato que no le gusta para el desayuno. Muchos adolescentes critican «asignaturas escolares innecesarias que no serán útiles en la vida».
  2. La sensación de ser adulto. Es en este período de la vida cuando el niño se siente persona por primera vez y siente una necesidad interior de tomar decisiones independientes. Esto lleva a discusiones con padres y profesores, porque el adolescente ahora cree que el valor de su opinión no es inferior.
  3. Egoísmo. Los adolescentes y jóvenes ya se sienten independientes, pero aún no han aprendido a pensar en los demás. Sus necesidades son cada vez mayores, por lo que exhiben un comportamiento extremadamente egoísta y, en ocasiones, agresivo.
  4. Categórico. Un adolescente maximalista no permite indulgencias, no hace concesiones y no acepta «gradaciones de gris» intermedias, sino que prefiere los extremos absolutos.
  5. Aversión a la crítica. Por supuesto, cualquier persona es sensible a las críticas. Pero el maximalismo hace que los adolescentes reaccionen de forma extremadamente dolorosa ante cualquier comentario crítico, por constructivo que sea.
  6. Nihilismo. Al analizar los valores, principios y puntos de vista de los padres, el adolescente no los acepta y los cuestiona. Esto también se aplica a los valores universales, que el joven maximalista se niega a dar por sentado.(Lea más sobre el nihilismo en este artículo).
  7. Extremos del ultimátum. Los adolescentes se caracterizan por una percepción dolorosa de cualquier situación que no les convenga. En este caso, reaccionan en forma de ultimátum: se niegan a almorzar, no hacen los deberes o ignoran algunas de sus tareas, que antes cumplían incondicionalmente.

¿Qué deben hacer los padres?

El momento en que el niño pasa por el maximalismo adolescente: este es un período muy responsable de los padres, porque es posible una variedad de situaciones desagradables. Pero lo primero que debe hacer es detener el resentimiento. No puedes culpar al niño en comportamientos extraños, porque es joven e inexperto, es difícil para él frenar las hormonas, y no tiene la culpa de lo que está sucediendo.

Para ayudar a un niño-maximalista dignamente a pasar este período de vida, se recomienda a los padres que utilicen los siguientes enfoques:

  1. Aceptación como igual. El adolescente quiere sentirse adulto e independiente. Es posible dejar que sea así, pero explique que otro atributo indispensable de la edad adulta es responsabilidad. Es necesario dejarle entender que debe ganar y demostrar regularmente el derecho de llamarse adulto.
  2. Provocar una protesta. Incluso si el adolescente se comporta con calma, internamente todavía protesta contra las decisiones de los adultos. Esto se puede usar, por ejemplo, insistiendo en que él o ella pase menos tiempo en el campo deportivo o salga menos caminatas afuera (si quieres que lo haga con más frecuencia).
  3. Tomar una decisión. Como adulto, debe darse cuenta de que debe elegir entre placeres. Por lo tanto, si un adolescente se involucra con una mala compañía, puede decirles que tiene que elegir entre pasar tiempo con ellos o ir al lago o al mar con la familia el fin de semana.
  4. Inculcar el pensamiento crítico. El pensamiento crítico desarrollado también es útil para pensar en el propio comportamiento. Es poco probable que un niño rebelde disputa que esta es una habilidad útil, por lo que estará feliz de desarrollarla. Es muy bueno si el niño sabe de antemano qué es el maximalismo adolescente y puede identificar esta condición en sí mismo cuando ocurre.
  5. Fomentar el desarrollo intelectual. Todos quieren ser más inteligentes, especialmente los maximalistas de los adolescentes. Es importante simplemente encontrar literatura informativa y educativa que realmente sea interesante para el niño. Y cuanto más inteligente sea, mejor podrá comprender sus propias experiencias y podrá hacer frente al maximalismo más rápido.

Conclusión

El maximalismo adolescente es una etapa inevitable y necesaria en el desarrollo de nuestra psique. Cada uno de nosotros lo ha pasado, por lo que no hay necesidad de reaccionar con dureza al ver a nuestros hijos entrar en esta fase de su desarrollo. Este es exactamente el período de la vida cuando un niño ingenuo, inexperto y egocéntrico se convierte gradualmente en un adulto sabio, independiente y responsable. Y no hay necesidad de esperar que esto suceda al instante. Sin embargo, los padres están obligados a apoyar a su hijo para evitar que cometa errores que pueden cambiar fundamentalmente toda su vida futura.