Configuración de objetivos: qué es, etapas, 7 métodos principales, errores

El establecimiento de metas

Un objetivo correctamente establecido y claramente formulado es la clave del éxito. Desafortunadamente, no todas las personas se dan cuenta de esto. Es por eso que hoy hablaremos sobre el establecimiento de objetivos, el establecimiento de objetivos competentes que garantiza el logro exitoso de los objetivos. Descubriremos qué es y cómo funciona, así como consideraremos varias técnicas populares de establecimiento de objetivos y analizaremos errores comunes que a menudo cometen los principiantes.

¿Qué es la configuración de objetivos?

El establecimiento de objetivos es el proceso de seleccionar objetivos, formularlos, planificar formas y definir criterios para lograrlos. Un objetivo es un resultado esperado de la actividad, que debe lograrse mediante esfuerzos intencionales. La configuración de objetivos se basa en las necesidades, deseos y valores del individuo. Este proceso implica que en lugar de ideas vagas, se formulan objetivos claros e inequívocos, para los cuales se especifican los criterios para la implementación y la dirección del movimiento es clara.

En el entorno individual, es importante tener una buena comprensión de usted mismo, sus valores, deseos y motivaciones. La imaginación, la creatividad, la lógica y el pensamiento analítico también son útiles. Por lo tanto, la configuración de objetivos no es un proceso tan simple. Es una habilidad bastante compleja que se puede desarrollar a propósito con el entrenamiento y la práctica. Afortunadamente, la configuración de objetivos de hoy está bien estudiada y descrita por muchos autores. También se han propuesto muchas técnicas para mejorar su efectividad.

Estructura de la configuración de objetivos

La configuración de objetivos es un proceso complejo que tiene una estructura compleja. Los elementos más significativos en esta estructura son elementos como:

  • darse cuenta de los objetivos principales que reflejan los valores de una persona;
  • sopesar las capacidades y los recursos disponibles;
  • darse cuenta de los motivos que serán la motivación para avanzar hacia los objetivos;
  • analizar y romper los objetivos en «ladrillos» (pasos, objetivos intermedios);
  • planificar cómo se alcanzarán los objetivos intermedios y principales;
  • visualizar el logro de los objetivos con resultados ideales;
  • Buscando recursos necesarios para lograr los objetivos;
  • el proceso real de lograr los objetivos;
  • Análisis de progreso y autocontrol, aplicando fuerza de voluntad;
  • Lograr el objetivo y obtener el resultado.

Comprender la estructura de la configuración de objetivos permite aumentar la efectividad de este proceso. Por lo tanto, este problema recibe una atención considerable en todo tipo de entrenamientos en efectividad personal y de equipo.

La relación entre objetivos y establecimiento de objetivos

Un objetivo es una representación subjetiva de un resultado ideal, de acuerdo con el cual se eligen las acciones necesarias. Desde el punto de vista de la psicología, el objetivo está directamente relacionado con el motivo. Por lo tanto, el objetivo crea la base para la actividad, y también, idealmente, debería ser el resultado final de esta actividad. Se pueden distinguir tres niveles de objetivos:

  • Primero (objetivos operativos). Estos son objetivos inmediatos y tareas cotidianas ordinarias. Como regla general, están dirigidos a la realización de los objetivos del siguiente nivel, pero pueden ser bastante independientes.
  • Segundo (objetivos tácticos). Estas son tareas más complejas que son los pasos necesarios para realizar los objetivos del siguiente nivel.
  • Tercero (objetivos estratégicos). Estos son los objetivos de la vida más significativos que determinan el progreso personal de un individuo. También pueden ser objetivos globales de un equipo u organización. Como regla general, los objetivos del tercer nivel requieren una configuración y planificación de objetivos serios.

En esencia, el establecimiento de objetivos es un proceso creativo de selección, configuración y formulación de objetivos. Cuanto mayor sea el nivel del objetivo, más complejo y serio será la configuración de objetivos. En los dos primeros niveles, se basa en la lógica y el pensamiento analítico, mientras que en el tercer nivel requiere un pensamiento sintético y un esfuerzo creativo considerable.

Etapas de establecimiento de objetivos

Un proceso de establecimiento de objetivos diseñado adecuadamente implica tres pasos principales:

  • Determinar las motivaciones. En esta etapa, el individuo determina lo que es más significativo para él o ella, lo que le da la mayor motivación. Del mismo modo, en el caso de la configuración de objetivos del equipo, se identifican las tareas y valores más significativos.
  • Selección de metodología. Hay una gran cantidad de metodologías diferentes (además consideraremos algunas de las más populares). Entre ellos, todos pueden elegir uno o varios de los más adecuados.
  • Utilizando la metodología elegida y hacer un plan. En esta etapa, se establecen y especifican los objetivos, se analizan los recursos disponibles, se destacan los objetivos intermedios y los pasos.

En el establecimiento y la planificación de objetivos, es necesario dejar espacio para «maniobra», porque es imposible prever todo. Puede ocurrir una fuerza mayor y otras situaciones imprevistas. Si crea una cierta reserva de tiempo, financiero y otros recursos, ninguna circunstancia puede evitar que logre sus objetivos.

Métodos de configuración de objetivos

El éxito del establecimiento de objetivos depende de cuán competente y metódico se utilice un enfoque. Hasta la fecha, se ha desarrollado una gran cantidad de métodos diferentes para garantizar una alta eficiencia de este proceso. Consideremos algunos de los más populares.

1. inteligente

Este método incluye cinco componentes (lleva el nombre de las primeras letras de estos componentes):

  • Específico. El objetivo debe ser específico y comprensible. Si establece una meta para «enriquecerse» o «tener éxito», no habrá especificidad en él. Por lo tanto, no tiene sentido en tal meta. Es necesario comprender lo más preciso posible lo que necesita lograr. Por ejemplo, podemos estar hablando de comprar un automóvil de una marca y modelo en particular.
  • Mensurable. El objetivo debe ser medible cualitativa y cuantitativamente. Por ejemplo, puede establecer un objetivo para aumentar sus ingresos a un valor específico. Esto no solo le permitirá comprender claramente qué resultado debe esforzarse, sino también monitorear su progreso.
  • Realizable. Es necesario evaluar adecuadamente sus capacidades y recursos para comprender claramente que el objetivo se puede lograr y no es un sueño imposible.
  • Importante. Para cuando se espera que se logre el objetivo, aún debería ser relevante. Por ejemplo, de acuerdo con los puntos anteriores, uno puede planear comprar una casa en un complejo residencial en particular. Pero la pregunta es si habrá apartamentos vacantes para cuando se acumulen los recursos necesarios.
  • Tiempo enmarcado. No a todos les gusta establecer plazos, pero en la configuración de objetivos es muy importante limitar el tiempo para lograr el objetivo. Al menos, esto es requerido por la metodología inteligente.

Vale la pena señalar que esta metodología tiene muchas interpretaciones con interpretaciones alternativas para todos los elementos. Inicialmente se desarrolló para la gestión de proyectos en un equipo, pero resultó ser tan conveniente y exitoso que comenzó a aplicarse en todas las áreas de actividad, adaptándola a diferentes tareas. De ahí el número de variaciones.

2. El método Brian Tracy

Brian Tracy, un conocido autor de libros sobre autodesarrollo, ha propuesto su propio método de establecimiento de objetivos. Para usarlo, escriba 10 objetivos para el próximo año en una gran hoja de papel. La redacción correcta de los objetivos es muy importante: deben formularse como si todo ya se hubiera hecho y logrado. Ahora, mirando cada elemento en la lista resultante, piense en cuánto lograr ese objetivo mejorará su vida. Después de elegir el objetivo más importante de la lista, escríbelo en una hoja de papel en blanco y use la metodología inteligente para analizarlo en detalle.

3. Rueda de equilibrio

Obviamente, no puedes arrojar toda tu energía a lograr objetivos en un solo área de tu vida. Y esta técnica de establecimiento de objetivos tiene como objetivo lograr el equilibrio. Primero, piense en qué áreas de vida son más importantes para usted. Después de eso, dibuje un círculo y divídalo en sectores iguales de acuerdo con el número de esferas. Ahora evalúe honestamente su éxito en cada una de estas esferas en una escala de 10 puntos y sombree una parte del sector correspondiente. El diagrama resultante le permitirá evaluar las áreas potenciales de crecimiento que debe considerar al establecer objetivos.

4. Mantener un planificador diario

Esta herramienta es simple y fácil de usar, pero al mismo tiempo muy efectiva. Las personas que usan un planificador diario de forma regular son mucho más productivas y más exitosas en todas las áreas de la vida. Entre otras cosas, esta herramienta ayuda a formular objetivos, así como a rastrear y analizar el proceso de lograrlos. Y debido a esto, puede ser muy útil en un esfuerzo como la configuración de objetivos.

5. El método Gleb Arkhangelsky

El experto ruso y autor de los libros de gestión del tiempo Gleb Arkhangelsky ha creado su técnica de planificación y establecimiento de objetivos que funciona bien en circunstancias que cambian dinámicamente. Esta técnica consiste en establecer límites, más allá de los cuales no puede ir, pero dentro del cual puede mantener una cierta libertad.

Es importante que el objetivo que establece no entra en conflicto con sus valores de vida personal. Debe descomponerse en pequeñas subtareas y agruparse por nivel de dificultad. También entre ellos debe distinguir tareas difíciles (aquellas que deben realizarse por un tiempo específico) y suaves (aquellos para los cuales no se establece una fecha límite estricta). Para el objetivo principal, el tiempo de logro debe, por supuesto, definirse estrictamente.

6. tablero de visualización

Esta técnica le permite visualizar sus objetivos y mantenerlos frente a sus ojos como motivación. La mejor tabla para usar es una placa en la que puede dibujar con marcadores de colores y que se puede borrar fácilmente. Pero también se pueden usar otros tipos de tableros. Por supuesto, sería demasiado quisquilloso registrar todas sus actividades diarias en este formato, pero para tareas globales por períodos significativos de tiempo es una gran opción.

7. Tarjetas de intelecto

Esta técnica está diseñada para una organización efectiva y una presentación visual de información de cualquier tipo. También se puede usar para la configuración de objetivos. En el centro de dicho mapa será el objetivo estratégico principal, y a su alrededor se ubicará objetivos tácticos y operativos. Al final de cada rama habrá tareas simples que se pueden iniciar de inmediato.

Errores comunes en el establecimiento de objetivos

Hay una serie de errores característicos en el establecimiento de objetivos, que no son tan difíciles de evitar, si conoce su existencia. Echemos un vistazo más de cerca:

  • Falta de especificidad. Como ya hemos aclarado anteriormente, los objetivos deben ser específicos, claros y medibles. Los criterios para lograrlos también deben definirse claramente. Muy a menudo las personas se olvidan de esto y formulan sus objetivos demasiado vagos, sin tratar de definir claramente por qué resultado se esfuerzan.
  • Prioridades Incorrectas. Las personas que establecen muchos objetivos a la vez a menudo olvidan priorizar. Por lo tanto, toman todo a la vez o dedican tiempo a tareas sin importancia, posponiendo las más importantes. Como resultado, ni siquiera notan que sus actividades se están volviendo cada vez más como la dilación, y continúan pensando que están trabajando de manera efectiva para lograr sus objetivos.
  • Objetivos poco realistas. En el establecimiento de objetivos, es importante evaluar sobrio sus capacidades y recursos disponibles. Además, es importante recordar que no todos los procesos pueden acelerarse 2 veces con el doble de esfuerzo. Por ejemplo, es imposible perder peso en 5 kilogramos en una semana, sin importar cuánto lo intente. Por lo tanto, una persona que se ha establecido tal objetivo enfrentará una decepción.
  • No planificar. Muchas personas sienten que el camino hacia un objetivo es demasiado obvio. Por lo tanto, no quieren pasar tiempo en la planificación, esperando que todo funcione como está. Pero un plan siempre ayuda a trabajar de manera más eficiente y a propósito, por lo que no puede descuidarlo.
  • Falta de control y análisis. La efectividad del establecimiento de objetivos y la planificación puede mejorarse significativamente al analizar las circunstancias y ajustar el plan en consecuencia. Pero la mayoría de las personas espera que puedan hacer un plan «ideal» a la vez, después de lo cual nunca tendrán que cambiarlo nuevamente.

Vale la pena recordar que el establecimiento de objetivos es un proceso universal. Los detalles individuales pueden cambiar, pero en general todo es lo mismo para todos, lo que significa que la mayoría de las personas cometen los mismos errores. Por lo tanto, preste atención a esta lista e intente tenerlo siempre en cuenta.

Conclusión

El establecimiento de objetivos es una habilidad muy importante que contribuye al éxito personal y profesional. Sería genial si más personas se hicieran su importancia y comenzaran a usarla en todas las áreas de sus vidas. No hay absolutamente nada complicado al respecto, y las técnicas relevantes están disponibles para todos. Simplemente intente elegir uno de sus objetivos y trabaje en ello en detalle, utilizando las técnicas que hemos discutido anteriormente. Rápidamente verá que es mucho más fácil lograr resultados de lo que parece a primera vista.