Iniciativa: lo que es en palabras simples, ejemplos de manifestación

Planificador

La iniciativa (de la palabra latina «initium», es decir, el comienzo) es una decisión tomada conscientemente que implica una actividad activa. De hecho, la iniciativa es el primer paso, un tipo de impulso, alentando a una persona a comenzar ciertas acciones en varias esferas de la vida, refleja el liderazgo activo del individuo. Es la manifestación de la iniciativa lo que ayuda a una persona a tener éxito en lograr objetivos a corto plazo y globales.

La predisposición de una persona a tomar decisiones volitivas independientes, así como la capacidad de una persona para ir claramente a un objetivo determinado se llama iniciativa. Esta calidad es poseída por muchos líderes, empresarios y gerentes exitosos, además, la iniciativa se considera una calidad inherente a una personalidad madura y formada. Además, una persona proactiva se caracteriza por la independencia, se caracteriza por la actividad y las cualidades volitivas, manifestadas tanto en el desempeño del trabajo mental y físico. Una persona emprendedora es ingeniosa, emprendedora, no le gusta obedecer las instrucciones impuestas y tomar una posición pasiva, dotada de coraje, determinación y la capacidad de asumir la responsabilidad de sus decisiones.

Características de una persona emprendedora

Todas las personas emprendedoras poseen una lista de rasgos y características específicos. Éstas incluyen:

  • vigor;
  • flexibilidad de la mente, la capacidad de tomar decisiones extraordinarias rápidamente;
  • creatividad;
  • inclinación a la actividad empresarial;
  • alto nivel de responsabilidad por las decisiones tomadas;
  • inclinación a la independencia, cualidades de liderazgo.

La iniciativa está estrechamente relacionada con la capacidad de fallar y luego hacer nuevos intentos en el camino hacia el objetivo, lo que, al final, lleva a una persona emprendedora a la realización de los concebidos en realidad. A pesar del estereotipo establecido en el espacio postsoviético sobre la indesiabilidad de la iniciativa, y a veces su castigabilidad, es una iniciativa que a menudo ayuda a una persona a lograr un éxito significativo en varias esferas de la vida. Además de lo anterior, la manifestación de la iniciativa es impensable sin cualidades tales como decisión, disposición a asumir riesgos justificados y responsabilidades de las decisiones tomadas anteriormente.

Ejemplos de iniciativa

Uno de los ejemplos de iniciativos más simples y directos es tomar la iniciativa en el lugar de trabajo. Por ejemplo, un empleado piensa que es necesario y apropiado cambiar de papel a registro electrónico: piensa en una idea, desarrolla un plan y se lo presenta a su supervisor. La sugerencia para mejorar el flujo de trabajo es la iniciativa. Si el supervisor está de acuerdo con la viabilidad de dicha solución, el empleado que lo propuso puede ayudar en todas las formas posibles en la implementación del plan. De hecho, hay muchos ejemplos de iniciativa en el lugar de trabajo, este es solo uno de los muchos.

Otra área donde a menudo se muestra la iniciativa es en las relaciones. Por ejemplo, cuando un chico conoce a una niña, su relación puede estar en una etapa de incertidumbre, ya sea amistad o amor. Para dejar en claro, tendrá que tomar la iniciativa, por ejemplo, al tipo para informar sobre sus sentimientos o hacer un acto que indique la intención de construir una relación (invitando a la niña, tomando su mano). Todos estos son ejemplos de mostrar iniciativa en una relación.

También se pueden rastrear ejemplos de iniciativa en la relación entre padres e hijos. Por ejemplo, cuando un niño todavía es joven y los padres no conocen sus verdaderos deseos, puede sentir en sí mismo, por ejemplo, un amor por el baile. Si el niño declara a sus padres que quiere aprender a bailar, pide ayudar a encontrar una escuela adecuada, elija un entrenador; esta es la iniciativa que se muestra por el niño.

¿En qué áreas se muestra en la iniciativa?

Identifique una serie de áreas de actividad humana, en las que es imposible hacer sin iniciativa. En primer lugar, para ellos debe atribuirse:

  • Actividad profesional. La manifestación de la iniciativa del empleado está en el desempeño oportuno y cualitativo de sus deberes laborales, para proporcionar asistencia factible a otros empleados y al superior inmediato. La iniciativa del gerente consiste en ayudar a sus subordinados, explicándoles sus deberes y alentándolos por su satisfacción cualitativa y rápida. Tanto en el primer como en el segundo caso, la manifestación de la iniciativa ayuda al equipo a hacer frente con éxito a las tareas establecidas antes, y los empleados más proactivos son honrados con bonos y promociones.
  • Esfera de relación. La construcción de relaciones armoniosas es imposible sin iniciativa: desde la etapa de conocimientos hasta construir una relación de confianza entre los socios, así como la aparición de su sincero deseo de cambiar por el bien de la otra persona.
  • Crecimiento personal. La iniciativa ayuda a las personas a crecer y desarrollarse a lo largo de la vida, alentando a las personas a aprender cosas nuevas, establecer metas y desarrollar planes para su implementación, a realizar en este mundo. Obtener un nuevo conocimiento y, en consecuencia, el desarrollo personal, sin iniciativa es imposible en principio.
  • Aprendiendo. Aprender un nuevo conocimiento es impensable sin iniciativa, porque en ausencia de un deseo de aprender algo nuevo, cualquier proceso de aprendizaje pierde su significado.
  • Actividad creativa. La actividad creativa está inextricablemente vinculada con la iniciativa creativa, que debe desarrollarse desde una edad temprana.

Aspectos positivos de la iniciativa

Los beneficios de la exhibición de iniciativa de un individuo son obvios y comprensibles. Una persona emprendedora no puede en palabras, pero de hecho para darse cuenta de sus deseos y aspiraciones, pone en práctica lo que ha planeado, toma una posición de vida activa, se comporta de forma independiente e independiente. Otras ventajas de iniciativa incluyen los siguientes aspectos:

  • Una persona de iniciativa disfruta de un mayor respeto y autoridad que un individuo pasivo y no iniciativo.
  • Tales personas suben por la escalera de carrera más rápido.
  • Las personas que muestran una iniciativa personal tienen menos problemas con la autoestima.
  • La iniciativa obliga a la personalidad a desarrollar, mejorar, adquirir nuevos conocimientos y habilidades.
  • Iniciativa Las personas son más notables, se destacan entre la multitud.

Reglas de iniciativa exitosa

Los psicólogos distinguen tres reglas de iniciativa exitosa, que pueden traer resultados verdaderamente tangibles y duraderos:

  1. La iniciativa debe ser apropiada. Y, por lo tanto, antes de estar activo, es necesario planificar cuidadosamente las acciones futuras, sopesar todos los matices y aspectos del próximo caso, evaluar la situación actual y elegir el momento adecuado para comenzar la acción.
  2. Es necesario actuar decisivamente. Solo las acciones decisivas pueden ser exitosas, y la preparación de un individuo para aceptar la responsabilidad de sus consecuencias (tanto en caso de éxito como en el fracaso) juega un papel importante.
  3. Compórtate correctamente. A veces, una persona emprendedora se vuelve demasiado persistente e intrusiva, lo que puede resultar muy ambiguo y, a menudo, percibido negativamente por los demás. Por lo tanto, no podemos olvidarnos de la cortesía, la corrección y el tacto.

¿Cómo se forma la iniciativa?

Los primeros signos de iniciativa se pueden considerar en los niños a una edad muy temprana, en el futuro se manifiestan a lo largo de la vida de una persona. La iniciativa del niño se nota desde muy pequeño, gracias a ella la personalidad en formación comienza a desarrollarse y comprenderse a sí misma. La falta de iniciativa en los niños se considera un signo bastante alarmante del desarrollo de la personalidad y requiere consulta con un psicólogo.

El desarrollo de la iniciativa se forma en las siguientes direcciones:

  1. Iniciativa creativa, a través de la cual los niños forman y desarrollan la imaginación y la fantasía, la formación del pensamiento imaginativo, la capacidad de comprender información. Este tipo de iniciativas se pueden desarrollar a través de juegos de cuentos.
  2. La iniciativa comunicativa se desarrolla en el proceso de interacción entre los niños, ayuda a desarrollar las habilidades del habla y sienta las bases para que el niño comprenda a sus compañeros, sus sentimientos y motivos de comportamiento.
  3. La base de la iniciativa cognitiva es la curiosidad de los niños; ayuda a los niños a desarrollar habilidades para establecer relaciones de causa y efecto y relaciones genéricas para comprender y comprender mejor el mundo que los rodea.
  4. La iniciativa motora juega un papel crucial en la formación adecuada del cuerpo del niño, su esencia radica en diversas acciones físicas y otras actividades físicas, por ejemplo, en la participación de los niños en juegos al aire libre o en su participación en actividades deportivas.

¿Cómo desarrollar la iniciativa?

La iniciativa se refiere a rasgos de carácter bastante específicos, no se puede formar en un lugar vacío y requiere un desarrollo gradual. Para desarrollar esta importante cualidad, una persona debe, en primer lugar, aprender a ser responsable y a poder confiar en sus propias fuerzas. En el futuro, es necesario deshacerse del hábito de la inacción y simplemente esperar a que lleguen los mejores días, dejar de retrasar la solución de los asuntos importantes y cotidianos, trabajar sin órdenes ni instrucciones superiores, únicamente por su propia cuenta. por iniciativa propia.

No es necesario insistir en la negatividad y las críticas dirigidas a usted. No olvides que sólo no se critica a quien no hace nada. Además, se debe prestar atención constante a las críticas razonables y constructivas, sacando conclusiones de lo dicho, pero es mejor pasar por alto las charlas ociosas y los chismes. Un papel importante en el desarrollo de la iniciativa lo juega una mente vivaz, la capacidad de tomar decisiones extraordinarias y rápidas y, por lo tanto, no ser perezoso para desarrollarse, crecer como persona, adquirir constantemente nuevos conocimientos y analizar la información obtenida de diversas fuentes.

Conclusión

Las personas están creadas para acciones activas, no para someterse a las circunstancias actuales, pero cada uno es libre de elegir cómo actuar en una determinada situación. Sin embargo, cambiar las circunstancias a través de la iniciativa no es lo mismo que una persona que cambie a un modelo de comportamiento descarado y agresivo. La iniciativa implica, en primer lugar, coraje para elegir una meta y formas de lograrla, un alto nivel de responsabilidad por las propias acciones, disposición para realizar consistentemente los propios deseos y sueños sin violar el espacio personal de otras personas.

Como regla general, las personas más a menudo se arrepienten de sus propias ideas no realizadas que del hecho de haber intentado realizarlas, incluso si no tuvieron éxito. Y, por tanto, la manifestación de iniciativa puede atribuirse a rasgos puramente positivos del comportamiento humano.